El Consorcio de Transportistas Urbanos Ciudad de Loja, planteó una acción de protección en contra del Municipio de Loja; aduciendo que se han violado sus derechos, entre ellos el de la petición, seguridad jurídica y el derecho a tener una vida digna.
“Esto hará que el municipio revise nuestra petición y tome acciones de manera rápida. El problema viene desde el 2020, 2021 y 2022, hasta la presente fecha. Estos últimos 3 años han sido duros para el sector transportista urbano de Loja, debido a los efectos de la pandemia provocada por el Covid-19, la eliminación del subsidio a los combustibles y los gastos operativos como tal. Es así que, Se ha solicitado realizar una revisión técnica por parte del municipio, pero no hemos sido escuchados con los efectos y de la forma debida, hasta la fecha” sostuvo en una entrevista con Radio Corporación, Diego Guerrero Ordóñez, Administrador del Consorcio de Transportistas Urbanos.
Ante estas declaraciones, acudimos con el concejal Pablo Burneo, quien expuso su postura y visión ante la problemática. “Yo he sido muy crítico con el incremento del pasaje de bus urbano pretendido por el Consorcio de Transportistas Urbanos de Loja. Me parece irracional ya que el servicio es pésimo, no ha mejorado durante años y nunca han cumplido con la integración del servicio. De manera mañosa hicieron una reforma a la ordenanza del SITU (Sistema Integrado de Transporte Urbano) para que se considere intermodal el servicio y así, no ofrecer la interconectividad, contradiciendo el espíritu con el que fue creada la ordenanza que posibilitó la creación del SITU”, señaló.
Añadió, “Al no haberse cumplido ese principio todo acto es contrario al interés más amplio de los lojanos que buscan un servicio de calidad. Los problemas de esa masificación de vehículos privados se dan porque el servicio que da el Consorcio de Transportistas, es mediocre. Entonces, esa pésima dirigencia que cada día tiene menos pasajeros y perjudica a sus propios socios donde permanecen paradas más de 50 unidades al día. Eso, perjudica a los ciudadanos que ven reducidas sus rutas y también a los transportistas” argumentó el concejal municipal de Loja.
Recapitulando expresó, “En un inicio, el precio del pasaje con el alza, pretendido por los transportistas era de 49 centavos y luego se bajó a 47. Pero, el estudio del municipio los favorece apenas con el incremento de 1 centavo, eso considerando el alza del diésel; cosa que el presidente Lasso disminuyó de 1.90 a 1.75 centavos. Ósea, que ya no se justifica, ni de esa manera el incremento pretendido, así que, para mí, si hay un interés por parte de los concejales del municipio de Loja en subir el pasaje de bus urbano, es que, ya está, el hombre del maletín rondando tanto el actual cabildo, donde no les dejamos ganar, como en el nuevo».
Ante estas versiones contrapuestas, salimos a la calle para consultar a la ciudadanía su opinión sobre el incremento de los pasajes para el bus urbano, donde manifestaron lo siguiente:
Janeth Merino es vendedora ambulante, tiene 56 años en este mundo. Su rostro marcado de arrugas y paño refleja; quizá, una vida llena de obstáculos superados. Viste con una gorra de visera ancha que protege la mitad de su rostro ante la fuerza de los rayos solares vespertinos que calientan el hormigón y las suelas de los transeúntes que cruzan la Catedral de Loja, esta combina con un suéter gris a medio cerrar, su calentador azul oscuro se ha desteñido por el uso y abuso del tiempo que arremete contra toda tela. Ella, de lunes a viernes, por la tarde; recorre de esquina a esquina la Plaza Central de Loja con su canasto amarillo entretejido de caña brava o paja toquilla donde anidan los chifles, camotes, canguiles y maduros fritos, que ella misma elabora y empaca para vender.
Janeth es vendedora ambulante desde el 2018. Tiene 3 hijos estudiando, 2 en el colegio y una en la Universidad, afirmó a Radio Corporación que, solo ella; utiliza 2 veces al día el recorrido que realizan dos buses urbanos para llegar, de su casa al trabajo y viceversa. Pues, no puede caminar largos tramos, debido a un problema en su extremidad inferior izquierda; producto de un accidente laboral, ella no desea que suban el pasaje del bus urbano porque nadie le garantiza un incremento de sus ingresos o mejora de las ventas. “Hay días malos donde solo se venden uno o dos chifles, camotes, canguiles o maduros y eso, solo alcanza para el pasaje diario” expresó.
Por su parte, María de los Ángeles Muñoz, oriunda de Zaruma, es discretamente hermosa; sus lentes decoran su rostro perfilado y protegen sus ojos claros que disparan firmeza y convicción a quemar ropa, estudia en la universidad Nacional de Loja y explica que cada día utiliza dos líneas del transporte público urbano, primero la roja para llegar hasta la estación conocida como El León y luego la verde para llegar a la Universidad. A veces, “no tenemos para el diario vivir o los alimentos y si nos afecta la subida del pasaje a los estudiantes”
Gloria Cuenca, relató que en su familia son cinco personas, por ello, una elevación del pasaje no sería conveniente porque “a veces no hay dinero” destacó. Considera que el servicio es necesario. Ella, mantiene sola a su hogar, uno de sus hijos tiene discapacidad intelectual y comentó “en ocasiones, toca coger 3 buses, uno para bajar al mercado, otro para salir a comprar las tarjetas del Simert, (que vende) y un tercero para llegar a la casa”
Pablo Quispe, trabaja como lustrador de zapatos durante 8 años en una vereda de la calle Colón, cerca de la Casa de la Cultura de Loja. Afirma que el servicio de los buses es malo porque no pasan de forma seguida y les afecta a los estudiantes ya que no pueden llegar con el tiempo debido a sus lugares de estudio y no pueden entrar. Además, “no respetan a los discapacitados o de la tercera edad porque andan apurados y apenas suben arrancan y escapan de hacer caer o golpearse a las personas”. Entonces, esto está mal, si quieren subir el pasaje deben dar buen servicio y si nos afecta a quienes no tenemos un trabajo seguro la subida de la tarifa en el bus.
Rosa Palacios, considera que el alza de pasajes no se ha dado desde tiempo atrás, pero debe realizarse un estudio o existir algo que regule el tema porque en Loja las distancias son cortas. Además, deben mejorar el servicio, hay que considerar que unos 5 o 10 centavos si, no afecta al bolsillo, pienso que lo normal serían 0.5 centavos, pero regulando y tomando en cuenta que no se afecte el bolsillo de los lojanos o ecuatorianos, fue su opinión mientras la entrevistamos en una esquina de la avenida peatonal más transitada del centro lojano, la 10 de agosto, bajo una pequeña sombra que formaba un rectángulo en toda la cuadra.
Por último, Pablo Burneo, concejal de Loja, expone una posible solución a la problemática que él considera justa. “La solución para los transportistas es la creación de la empresa municipal de bus urbano para que tengan la garantía del derecho al trabajo digno en el bus urbano y así, todos los transportistas puedan ganar de una manera equitativa; de una caja común única. Así que, lo que yo planteo con esta creación de la empresa pública municipal es que tengamos todos la oportunidad de contar con un servicio moderno de un pasaje de bus sostenible y con un servicio que preste la cobertura en toda la ciudad y con un pasaje único, integrado; incluido el pasaje universitario que lo quieren dejar de lado”. Para Burneo, la propuesta realizada desde el Consorcio, no es viable y considera que este debe extinguirse para crear la empresa municipal de Movilidad Urbana de Loja.
